Reflexiones de un sábado por la mañana...

Un ipod verde
mirada cruzada, casi sin mirada.

Y un mundo en mis ojos.

Si siempre mezclo cosas…

¿Cómo lo adivinarás?

5 segundos eternos…

y nada. Como siempre.

Este es mi juego: un solitario.

Yo me lo guiso, yo me lo como

¿Y tú? Ni te enteras.

Porque las reglas las he puesto yo. Sólo yo las conozco.
Sólo yo las practico.

Tatuaje

Ya tengo hora para hacerme el tatuaje.

Anoche empecé a entrar en pánico.

¿Mi alma? Perdida




Dame una corona más
que esta noche yo quiero perder
la conciencia que me hace temblar
cada vez que te veo venir
y volverme invisible
tal vez seguirte por toda la ciudad y llegar a tu casa

sentarme a tu lado
escucharte escondida
conversar saber lo que piensas de la vida cuando ves las noticias

protegerte de noche a los pies de tu cama descifrar el sentido de tus sueños quedarme los besos que se escapan
cada vez que respiras
cada vez que dormido me hablas

Dame una corona más
para ver si dejo de pensar
en poderes paranormales
de heroína de cómic
y me atrevo a acercarme hasta ti
soltarte a la cara la verdad
y dar media vuelta
recoger mi chaqueta
y salir por la puerta contigo

(Estribillo)
Te daré mi corazón
te daré mi vida
te daré mi alma perdida

Ojalá ojalá nunca cambies
esa forma que tienes de
estar en el mundo
ojalá que el tiempo no te cambie

(Estribillo)
Te daré mi corazón
te daré mi vida
te daré mi alma perdida

Te daré mi corazón
te daré mi vida
te daré mi alma perdida
te daré mi alma perdida

Dame una corona más
Dame una corona más

Y sigo...

De nuevo, y hasta que lo termine. ¡¡Qué libro tan maravilloso!! El otro día, subía las escaleras del metro, que es habitualmente donde leo, lo confieso, filóloga y perezosa, amante de las letras, pero vaga.

En casa... me cuesta, no voy a negarlo: estoy en mi sofá, acurrucadita, o estirada lo pequeñamente larga que soy, o delante del ordenador ¡qué extraño! con los vídeos a cuestas... siempre hay música de fondo, de ahí que piense en tatuarme y de ahí que ese sea el motivo... Pero a lo que voy... a veces piensas: ¿volveré a leer algo que me atrape? ¿Volveré a sentirlo?

Y no es una historia de amor, ni siquiera es que enganche, sino que contiene magia, todo él, cada frase, cada palabra. No todas, no voy a engañar a nadie, apasionada en mis frikismos, ya sabéis, pero tampoco tan exagerada. Como decía, contiene magia, pensamientos casi filosóficos procedentes de una mente infantil... y de otra que se esconde. Sensaciones familiares, personas mágicas, bichos raros. Genial!


De ahí que subraye esas pequeñas magias, y las comparta:



La música desempeña una función muy importante en mi vida. Es lo que me permite soportar... pues... todo lo que hay que soportar: mi hermana, mi madre, el colegio, Achille Grand-Fernet, etc. La música no es sólo un placer para el oído como la gastronomía lo es para el paladar, o la pintura, para los ojos. Si pongo música por la mañana tampoco es que la razón sea muy original: lo hago porque determina el tono del día. Es muy sencillo y, a la vez, muy complicado de explicar: creo que podemos elegir nuestros estados de ánimo porque poseemos una consciencia con varios estratos y tenemos la manera de acceder a ellos.

La elegancia del erizo
Muriel Barbery


De 12 años a 29 ¿cuántos hay? el doble + 5... mmmmm... pues como si tuviera 12 + 5 menos... aunque yo no elijo.

07/07

Quisiera agarrar instantes con estas manos blancas.

Quiero coger pasados y traerlos a este instante, en este instante.

Quiero coger esos pasados y retorcerlos, derribarlos.



¿Y esta tontería? Es mía.

Mientras pienso...

"Me he puesto como objetivo tener el mayor número posible de ideas profundas y apuntarlas en este cuaderno: si nada tiene sentido, al menos que el espíritu se vea forzado a enfrentarse a tal situación, ¿no? Pero como tengo una vertiente japonesa muy acusada, he añadido una obligación más: esta idea profunda ha de expresarse bajo la forma de un pequeño poema a la japonesa: un haikú (tres versos) o un tanka (cinco versos).

Mi haikú preferido es de Basho:

En esas chozas
comen los pescadores
¡gambas y grillos!

¡Esto, de pecera nada, no; esto es poesía, sí, señor!
Pero en el mundo en el que vivo, hay menos poesía que en una choza de pescador japonesa.


[...]

¿Dónde se encuentra la belleza? ¿En las grandes cosas que, como las demás, están condenadas a morir, o bien en las pequeñas que, sin pretensiones, saben engastar en el instante una gema de infinitud?


[...]


"Té y manga contra café y periódico: la elegancia y el embrujo contra la triste agresividad de los juegos adultos de poder."

La elegancia del erizo
Muriel Barbery

...pero yo sigo necesitando café.